La Iglesia de Santa María della Salute en Venecia fue diseñada por Baltassare Longhena la cual se basa en un planta octogonal donde el noveno punto hace referencia a la divinidad. Las volutas en el exterior logran enmascarar los contrafuertes y, en cambio, en el interior los arcos de medio punto sostienen la cúpula de la iglesia que conforman a su vez las capillas decoradas con una rebuscada ornamentación donde el mármol se adueña del espacio. La conformación de esta iglesia votiva se basa en la Iglesia de San Vitale.