El Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), México, ha renovado su estrategia visual a través de una nueva imagen con el objetivo de reflejar el prestigio académico y el espíritu emprendedor de los que son marca, obteniendo así un símbolo de exposición internacional para el uso cotidiano. Con la posesión de dos escudos, uno para los eventos ceremoniales, actos más oficiales y distinguidos (el tradicional) y otro para la vida diaria y cotidiana (el nuevo), con una forma más sencilla, amena, moderna, flexible, que es visible incluso en pequeños tamaños como podemos observar en pendrives, el icono de la app de la universidad o en tarjetas de presentación, sigue la base de otras instituciones universitarias americanas con el afán de seguir siendo considerada como una de las universidades referentes no solo en México.
El nuevo emblema refleja valores como la educación, la luz de conocimiento, el liderazgo, la idea de logro representada por la antorcha olimpica en un planeta azul, el de la internacionalización, de la que es un excelente impulsor el ITESM.
El escudo oficial, resultado de un concurso en 1944, se ha utilizado durante todos estos años como elemento gráfico de identificación del ITESM y que a partir de ahora se utilizara exclusivamente para eventos y actividades altamente formales y de prestigio. En el interior del aro de este historico escudo podemos observar el nombre institucional, el matraz Erlenmeyer y la probeta (graduada como indicación de la importancia de la medición y evaluación) como representación de la ciencia y la industria química; los rayos (como muestra de la importancia de la electricidad en el desarrollo); un crisol (que recibe la energía de los rayos dando lugar a una interpretación similar a la del conocimiento) y el engranaje (simbolo del trabajo y la industria). Fuera del aro podemos apreciar la mano y la antorcha (con la intención de iluminar el camino de la libertad), el laurel (inteligencia, prestigio) y el libro (fuente de conocimiento con una letra marcada T, Tecnologico, como inicio de un capítulo en la historia de Monterrey).
