En la Arquitectura paleocristiana de Italia no existe una integración de torre y basílica,
donde la torre aparece siempre colocada al lado de la iglesia, como si se
tratase de un campanario independiente consiguiendo así que el Románico
italiano tienda más a la separación y a la adición que a la integración. Veremos a continuación más en detalle el caso del complejo religioso de Pisa (Italia).
El complejo de la catedral de Pisa (Duomo di Pisa) es uno de los monumentos
más representativos de la arquitectura medieval italiana compuesto por cuatro
edificios: la catedral, el baptisterio, el campanario y el campo santo. Famosa
por su torre inclinada es unificada con todos los edificios con la utilización
y el tratamiento uniforme de los muros con paneles de mármol blanco y
articulados mediante arcadas. El baptisterio se dispone en el eje de la
catedral con una cúpula oval ene el crucero mientras la archiconocida torre en
el lado opuesto.
Los italianos rechazan con esta obra la masificación de la
arquitectura románica por la desmaterialización óptica del muro consiguiendo
que la iglesia no se convirtiera en un elemento independiente sino como núcleo
de un entorno urbano diferenciado.
